Instrucciones

El funcionamiento del juego es muy sencillo, en el mapa hay marcadas 9 zonas y cada una de ellas contiene una prueba que debéis resolver, pero están desordenadas, por eso todas tienen el número 1.

Para resolver las pruebas y encontrar las zonas sólo se necesita la información disponible en la app e información en la calle: monumentos, inscripciones, estatuas… Las claves pueden ser números o textos, deben ir sin acentos ni mayúsculas.

Esperamos que lo disfrutes.

Empezamos:

La Brújula de Fawcett – Agencia de investigación

Muchos nombres reconocibles han pasado por las monarquías mundiales a lo largo de los años, pero hay un nombre que siempre suena cuando se habla de la época del Renacimiento europeo y que la humanidad nunca podrá olvidar: los Borgia, una versión estilizada al italiano del apellido Borja.

No se puede negar que lo que se conoce de esta familia tiene por delante un velo de crimen y corrupción, un ejemplo claro siendo que al llegar al papado Alejandro VI, éste se vio involucrado en varias situaciones políticas internacionales las cuales hicieron que su imagen se consolidase. No hubo ocasión que el hombre no aprovechase para hacer crecer la influencia y poder de su familia y el suyo propio mediante alianzas y conspiraciones, teniendo consigo a sus cuatro hijos a los cuales usaba como instrumento en sus maquinaciones políticas.

De acuerdo con una vieja leyenda urbana, antes de morir, Alejandro VI envió a César Borgia de vuelta a Valencia en un viaje secreto acompañado de algunos tesoros del vaticano, para esconderlos en una habitación secreta.

A día de hoy y tras arduas búsquedas, esta historia no parece ser más que un mito nacido de la inventiva popular de la época. Puesto que muchas personas buscaron esa habitación en todos los rincones de Valencia y no la encontraron, los esfuerzos eventualmente se apagaron hasta que la credibilidad de la historia fue casi nula…

O eso pensábamos. Al entrar esta mañana a la oficina de nuestra agencia de investigación “La Brújula de Fawcett”, para nuestra sorpresa, había un sobre encima de la mesa; no tenía remitente alguno, y dentro de él había una carta corta:

Tengo información que les podría interesar sobre el secreto de los Borgia. Necesito vuestra presencia en Valencia urgentemente. Os daré más información mañana a las 12:00 en la plaza del ayuntamiento.