Mi abuelo desapareció con aquél maldito tesoro y más tarde, una llamada advirtió a mi familia que no le buscaran si deseábamos vivir tranquilas–. Estas fueron algunas de las palabras de Lucía, la nieta de aquel bombero, después de nuestra entrevista.

Nos explicó también que todo comenzó cuando su abuelo intentó malvender aquel tesoro ya que, al poco, un extraño personaje se puso en contacto con él. Su abuela le contó además que ese hombre tenía un acento un tanto peculiar y que antes de desaparecer sin rastro, el enigmático personaje y su abuelo se dieron cita en el Hotel María Cristina.

Solamente una pequeña carta, echada al buzón poco antes del encuentro, revelaba algo del asunto:

Nuestra cita tendrá lugar en el Hotel María Cristina a las 14:07 horas. Para saber el número de la habitación basta con que recuerdes con cuantos cañones se defendió el barco de Oquendo cuando los corsarios ingleses intentaron arrebatarle el tesoro y todo acabó en un naufragio…

Era hora de descubrir tan misteriosa habitación.