El hombre extranjero se hacía llamar Jean Paul y al parecer él también estaba buscando el cofre y llevaba siguiendo nuestros pasos desde el principio, cuando entramos en el bar. ¿Tal vez por eso huyó Ernesto?

Hablamos con él y confirmó nuestra teoría. Mientras nos esperaba en el bar, escuchó que alguién con acento francés intentaba entrar, pero al no saber la contraseña quiso entrar por la fuerza. Ernesto huyo por la puerta de atrás, consciente que corría peligro. Desde entonces ha estado investigando sobre Jean Paul, desde las sombras, puesto que lleva escondido desde nuestro último encuentro.

Esta investigación ha dado sus frutos y ha descubierto información valiosa sobre Jean Paul y sobre la investigación que estaba llevando a cabo Amin a raíz del pergamino. Para evitar riesgos, Ernesto nos ha envíado a su hermano Esteban con un mensaje. Nos advirtió que su hermano es un hombre moreno, con pelo largo, gáfas y bastante bajito, mide  un metro y medio. Para que nos de el mensaje debemos decirle una contraeña. Al llegar a la plaza lo vimos desde lejos, no paraba de andar de un lado para otro, al acercarnos dijo: Aquel día en mi paseo diario me habría ahogado. ¿Tendrá que ver algo con la contraseña para recibir el mensaje?